Vudú

El voo-do es una religión que se originó a partir de las creencias que poseían los pueblos que fueron trasladados como esclavos desde el África Occidental, del contacto de estas creencias con la religión cristiana propia de los países a donde fueron trasladados, y es posible que esté influido parcialmente por supervivencias del politeísmo céltico. Se trata de una variante teísta de un sistema animista, provisto de un fuerte componente mágico. Por su vinculación directa con la cosmología y los sistemas de creencias neolíticos, su estudio resulta de gran interés en el campo de la paleoantropología. El vudú se encuentra entre las religiones más antiguas del mundo, entre el politeísmo y el monoteísmo.

el vudú como cultura

vudú en mundospropios

El tráfico de esclavos hacia América produjo un fuerte fenómeno de sincretismo entre esta compleja y bien esquematizada religión y las creencias cristianas, así como con las religiones nativas de los lugares a donde se transportó a los esclavos. De aquí surgiría el vudú haitiano y un gran número de derivativos: la Regla de Ocha o Santería en Cuba, la Santería en República Dominicana, el Candomblé, la Umbanda y Kimbanda en Brasil, así como las manifestaciones africanistas en Puerto Rico y los demás países del área del Caribe, etcétera. Algunos de estos derivativos han llegado a Europa en décadas recientes, sobre todo de la mano de emigrantes retornados.

english

Vodun or Vudun (spirit in the Fon and Ewe languages) is an indigenous organized religion of coastal West Africa from Togo to Nigeria. Vodun is practised by the Ewe people, Kabye people, Mina people and Fon people of southern and central Togo, southern and central Benin and (under a different name) the Yoruba of southwestern Nigeria.

It is distinct from the various traditional animistic religions in the interiors of these same countries and is the main origin for religions of similar name found among the African Diaspora in the New World such as Haitian Vodou, the Vudu of Puerto Rico, Candomblé Jejé in Brazil (which uses the term Vodum), Louisiana Voodoo and Santería in Cuba and the Dominican Republic. All these are syncretized with Christianity and the traditional religions of the Kongo people of Congo and Angola.

vudú

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Wikipedia

Heinrich von Kleist – #21no

eine Spritztour zu Heinrich von Kleist mittels des einzigartig einfühlsamen Aufsatzes “Der Kampf mit dem Dämon” von Stefan Zweig.

Im Rahmen des Kleistjahres 2011 und zur Würdigung des Humanisten Kleist hat der Sender-FN eine Ehrung für den Dramturgen und Schriftsteller von-Kleist in künstlerrischer Art auf Film gebannt. Stefan Zweigs wundervolle Hommage Kampf mit dem Dämon, in essayistischer und biografischer Form zum gedenken an Kleist 1925 erschienen, bringt #21No in Bild, Ton und Farbe. Am 21. November 1811 starb Heinrich von Kleist mit nur 34 Jahren.

Der Film hält sich strickt an den Text von Stefan Zweig, der von Melanie Seeland gelesen wird. Als Kleistbummlerin hängt sie den Aufenthaltsorten des Genies an und reist seinen Lebensstationen nach. Sie interpretiert Zweigs Text sowohl in spielerischer- als auch in lesender Art. In träumerischen Kapiteln, mal hochverschlossen, mal in erotischen Posen, bringt sie dem Zuschauer, über Zweigs Text, das kleistsche Wesen näher. Die hohe emotionale Dichte des Textes verlangt ein breites Schauspiel, um die Aufmerksamkeit des Betrachters nicht abreißen zu lassen. Ohne inhaltliche Pausen ist #21No ein sehr fordernder Film, der seinen 11 Kapiteln jede Sekunde Aufmerksamkeit benötigt. Die dichterische Schönheit von Kampf mit dem Dämon und die Kleistbummlerin erleichtern es die Konzentration hoch zuhalten und sich auf den Film einzulassen.

Ist Heinrich von Kleist, Zweihunderteins Jahren nach seinem Tod noch in lebendiger Erinnerung die er verdient oder ist er ungehemmter Verdunkelung preisgegeben? Der Film #21No bringt ihn zurück in die moderne Gegenwart. Gerade durch die stärke des Textes der eine Brücke zur Zeit der Klassik schlägt, fällt es leichter die kleistsche Person und sein Werk zu verstehen. Ein sehr ambitionierter Film, der nichtkleistkenner den großen Schriftsteller näher bringt.

Website

sender-fn.de

Retsina- Film

Sprache: Deutsch; Länge 1h 9min
Mit Melanie Seeland
Ein Film von Matthias Merkle
Erschienen auf sender-fn.de
Text: Stefan Zweig
Kleistenbummlerin: Melanie Seeland
Tonmischung: Brian Krüger
Schnitt: Heinrich Bindschädel
Regie u.a.: Matthias Merkle
Musik (alles von ccmixter.org):

Der Film so wie die verwendete Musik stehen erfreulicherweise unter folgender CC-Lizenz BY-NC-SA

Vagos, pero insistentes recuerdos

A la luz de la luna siempre nos encandilábamos, torciendo nuestro rostro por el miedo a que nos devorace uno de esos monstruos nocturnos que su imaginación había creado para deleite de nosotros.

 

No sé por qué los eventos de la infancia, más que desvanecerse con el correr del tiempo, nos dejan una huella que perdura en la bruma de recuerdos almacenados en nuestra memoria. Hace algunos años falleció mi abuela. Todos la estimábamos mucho, inclusive mi padre, sin importar lo difícil que fue para él acostumbrarse a llamarla mamá y no suegra, por lo maquiavélico de lo que esta corta y última palabra encierra. Y que en su caso particular la prefería, ya que la  señora insistió tanto en que mi madre no se casara con un partido que no era de su agrado, pues según ella mi padre era un trasnochador y un sinvergüenza de primera categoría. Sin embargo, nada pudo hacer la pobre anciana para evitar que un «cafre» le robase su más bella flor, limitándose a decir » el amor es una pendejada y mi hija una pendeja de primer nivel».

El día del velorio mi viejo se vistió como de fiesta. Llevaba el mismo elegante traje negro que usó aquel caluroso día de marzo cuando se casó con mi madre. Una gruesa corbata negra con puntos rojos. Brillantina en el cabello. Lloriqueaba. Recuerdo que siempre la visitábamos mis dos hermanos mayores y yo, y éramos recibidos por la anciana con gran algarabía. Nos regalaba  dulces y otras cosas que extraía de los rincones de la casa con gran sigilo como si se tratase de un tesoro oculto a los ojos perniciosos de los demás, tesoro que había permanecido escondido por mucho tiempo esperando nuestra llegada. Y así empezaba que un carrito para vos, que un soldadito de plomo para este, que una estampita desteñida de la Santísima Virgen de Guadalupe para mí. Esperábamos al acecho, con ansias, la hora del refrigerio, que consistía en unas cuantas galletas rancias y un poco de refresco, y nos preparábamos con los vasos mas grandes, lo cual resultaba un ejercicio penoso para mí, ya que mis hermanos por ser los mayores llevaban siempre la delantera y me rezagaban al último sitio de la espera.

Ah! la abuela, la tierna y blanca abuela y su ritual de repartir el refresco me hizo caer en la cuenta que yo, al igual que mi padre, tampoco era de su total agrado. Mientras a mis dos hermanos les llenaba hasta el copete sus respectivos vasos rebosantes de burbujas, yo tenía que conformarme con ver la mitad de mi gigantesco vaso cargando ese líquido raro y maravilloso tan apetecido, mezcla de muchas cosas y que llamábamos refresco.

Los ojos de la abuela eran azules intensos, los míos café claros como los de mi padre; y quizás por esas diferencias, cuando nuestras miradas se encontraban, quedaba en el aire una especie de aroma a cálices muertos y tormenta. Durante buen tiempo se repitió el ritual de las galletas y el refresco, del gigantesco vaso de refresco lleno hasta la mitad y las azules e intensas miradas de la abuela que anunciaban la tormenta. Al pasar de los años, y por no dejar una rutina a la cual nos ha costado acostumbrarnos, seguíamos visitando a la anciana. Ya no habían galletas y tampoco refresco. Habíamos crecido y nuestros gustos se tornaron mas exigentes. La hora del almuerzo era la esperada y la carrera loca en busca de un recipiente inmenso se había detenido, ordenado. Nos sentábamos a la mesa y nuestra querida abuela nos servía, junto a un ayudante, porciones de manjares de forma equitativa, incluso yo, por ser el menor, tenía algunas preferencias. Mis hermanos callaban.

No sé por qué la extraño tanto. Tampoco puedo entender la sensación que sentí en su velorio cuando, al lado de mi padre, la observaba tendida en su ataúd y solo me vino el recuerdo del «puto e inmenso vaso de refresco lleno hasta la mitad». Pude sentir que a través de la mano de mi padre que me sostenía, bajaba un efluvio de irónica sonrisa mientras observaba fijamente a la vieja, la dulce anciana de los blancos cabellos e intensos ojos azules que nos durmió tantas veces en su regazo, contándonos fantásticas historias como jamás he leído.

(Ricardo Gálvez)

lulacruza

lulacruza
http://www.lulacruza.com/
Sus matices de variados tonos, texturas y reminiscencias parece provenir de diferentes influencias o zonas del mundo. ¿Cómo surge el sonido de Lulacruza?
Lulacruza es el resultado sonoro de todo lo que hemos oído en la vida… desde la música folklórica, pasando por la electrónica, la música experimental, hasta el rock, la música indígena… Cuando nos conocimos estudiando música en Boston, cada uno venia de tocar músicas muy distintas pero nos dimos cuenta de que teníamos una manera muy similar de pensar el sonido. Nos interesaba crear mundos sonoros, queríamos que el sonido fuera tratado como un material tangible y buscábamos hacer una música que de alguna manera reflejara los métodos orgánicos de la naturaleza.


http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/

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